Esta cruz, trabajada en plata con exquisito detalle, puede lucirse tanto como colgante como broche, gracias a su cierre trasero con pasador y anilla superior. Decorada con ágatas verdes, delicadas perlas de agua dulce y toques de cornalina, su diseño evoca la suntuosidad de la joyería victoriana y el simbolismo de las piezas devocionales antiguas. Las marcasitas aportan un brillo discreto que realza su rica composición. Una joya versátil y cargada de historia, perfecta para realzar cualquier look con carácter y elegancia.